Si en comiendo de mis carnes
tuviera alivio mi pena
a la voz de un pregonero
mis carnes yo las vendiera
En las esquinas te pones
a decir que no me quieres
tú andas loquita perdía
mala puñalá te peguen
Déjame que vaya y venga
al pilarico a por agua
que puede ser que algún día
en el pilarico caiga
Déjame que vaya y venga. Déjame que siga yo por dónde me susurra la brisa que mueve mis cabellos y pasa suavita por mis oídos. Y quédate tú tranquila, que algún día, puede ser que en el pilarico caiga. Grande. Y así sea.
3 comentarios:
Olee Morente! ;)
:-)
Olé!! Cómo me gusta este flamenco.
Salud.
Publicar un comentario