bajaban cuatro gitanas
por la orillita de un río.
En estos días de frío frío frío frío (pero frío), nos recuerda nuestro compañero Paco Roji, de Flamenka, estas bulerías tan grandes del genio de Camarón.
Yo a un anciano le pegué
cuando me faltó en la calle
al año cuando me enteré
que ese hombre era mi pare
duquelas grandes pasé
Cosita más sensible
voy a pelear yo con la muerte
y alcanzarla era imposible
Aunque no creas tú
como que me oye Dios
esta será la última cita de los dos
comprenderás
que por demás que te empeñes en fingir
que un mar dolor
no es como para morir
pero deshecha ya
aquella ilusión
a nadie yo en el mundo
daré mi corazón
devuélveme el rosario de mi mare
y quéate con toíto lo demás
lo tuyo te lo envío cualquier tarde
no quiero que te acuerdes nunca más.
Pudo ser una noche junto al mar
unos besos de mujer
y un adiós sentimental
Al alba
tu te fuiste al alba
Un sueño de amor entre tú y yo terminaría
y guardaré secretos que tú conmigo compartías
Y tú te marchaste al alba
gitanita mía
Pañuelo a rayas
con lunares coloraos
dime dónde lo compraste
quién te lo ha dao.
Tú no me dieras a mi más tormento, no no
por que tú ibas a acabar conmigo
y pero como dios es mu grande
a ti te va a mandar un castigo
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